El Vinagre Balsámico es conocido por su rico sabor y aterciopelado color oscuro. Este ingrediente derivado de las uvas, también conocido como aceto o vinagre de Módena, además de dar un toque sofisticado a ensaladas y platillos, ofrece una serie de beneficios para la salud que han sido comprobados en diversas investigaciones.
Propiedades:
- Ayuda a controlar el peso. Es por los probióticos que contiene, que mantienen el apetito a raya.
- Mejora el aspecto de la piel. La explicación está en las sustancias antimicrobianas, el ácido acético y los antioxidantes que contiene. Beber un vaso de agua con una cucharada de vinagre balsámico al día hará que tu piel parezca más fresca y limpia.
- Favorece la digestión. El vinagre balsámico contiene cepas de probióticos que ayudan a la digestión, promueven la salud intestinal e incluso pueden mejorar tu función inmunitaria y hasta tus niveles de energía.
- Reduce los niveles de azúcar. Tomado con las comidas, ayuda a evitar los picos de azúcar que se producen después de comer.
- Ayuda a reducir los niveles de colesterol ‘malo’. La reducción de los niveles de colesterol LDL (el ‘malo’) es de los beneficios más documentados del vinagre balsámico. Sus antioxidantes neutralizan células tóxicas que aumentan los niveles de dicho colesterol, el que se acumula en las arterias y reduce su diámetro.
- Combate la hipertensión. Añadir una cucharadita de vinagre balsámico de Módena a tus platos no solo mejorará su sabor, sino que puede ayudarte a controlar la hipertensión. Un estudio con ratones hipertensos comprobó que los animales que lo habían consumido de forma regular habían mejorado sus niveles de tensión arterial.
- Mejora la circulación. Al igual que las uvas y el vino de los que procede, el vinagre balsámico evita que las plaquetas se aglutinen, lo que evita la formación de trombos causantes de ataques cardíacos. Ahora se estudia también si los propios polifenoles del vinagre balsámico mejoran la circulación. Eso podría explicar por qué los italianos lo consideran un producto ‘anti-edad’.
Los italianos suelen servir como ‘antipasto’ trocitos de parmesano coronados con gotas de buen Vinagre Balsámico de Módena. Además de en ensaladas, risottos y pastas, lo toman también con carnes, huevos, pescados asados y hasta con fresones y natillas
Valoraciones
No hay valoraciones aún.